jueves, 17 de junio de 2010

Beneficios y peligros de las redes sociales: Como todas las herramientas, depende todo de cómo se las utilice


Los portales sociales, y en particular Facebook (el más conocido y utilizado de ellos), para muchos se ha convertido en algo tan necesario y reiterado y agradable, como el desayuno en las mañanas, o las clásicas salidas de fin de semana con la familia o con los amigos, o el informal contacto casi a diario con los noticieros de televisión. Esto revela por cierto el sustantivo aporte que en muchos casos las redes sociales brindan desde el punto de vista del reforzamiento de los contactos sociales, o por el contrario tal vez pone de manifiesto cierta cuota de adicción a la noticia ligera y al chismerío que en otros casos puede estar motivando a ciertos usuarios de este tipo de servicios.

Sea cual sea la tendencia mayoritaria que ha impulsado al alza el número de los usuarios de las redes sociales, con certeza hay un porcentaje no despreciable de usuarios y de ex usuarios de este tipo de sistemas, que levantan su voz de alarma o de protesta por tal o cual aspecto, lo que naturalmente impulsa el debate y la polémica. Precisamente, el pasado 31 mayo 2010 se organizó contra Facebook un boicot de protesta, que en realidad obtuvo escaso seguimiento, pero que es revelador de las críticas que se le hacen desde distintos bandos.

El principal motivo del referido boicot del 31 de mayo fueron los continuos cambios en la política de privacidad de la citada red social. Pero obviamente, no es necesario esperar a una "ciberprotesta" para borrarse definitivamente de Facebook, o para en ese espacio cambiar los hábitos personales de navegación y de manejo de información. Hay buenas razones para hacer este tipo de cuestionamiento constructivo en cualquier momento, y precisamente impulsar esta clase de reflexión es lo que da pie al presente artículo.

Pero antes de dar nuestros personales puntos de vista sobre este asunto, presentemos los problemas o las críticas que más conmunmente se hacen a las redes sociales, y en particular a Facebook.

El principal talón de Aquiles del gigante social Facebook, pareciera ser su política de privacidad que con notoriedad se ha visto afectada por numerosos cambios, lo que no solamente descoloca a muchos usuarios y los pone en ciertas situaciones de riesgo, sino que además da como para pensar que Facebook mercadea a escondidas, con parte de los datos de sus usuarios.

La gente se pregunta por qué hace cinco años era tan fácil imponer que "sólo mis amigos" pudieran ver mi información personal, y ahora la implementación de esta condición pareciera ser mucho más borrosa, flexible, y problemática.

Hay que convencerse, los perfiles y las fotos y los videos y los documentos y también los mensajes que hayamos ubicado en Facebook, ya no son nuestros y personales sino de cualquiera que se haya interesado en ellos y se haya molestado en sacar una copia. En Facebook, muchos tienen la falsa sensación de que todas las imágenes y los comentarios que ponemos son nuestros, como si con estas acciones estuviéramos decorando nuestro propio dormitorio o nuestra propia casa, pero esto es una mentira a voces; todos esos datos, incluso nuestra propia imagen retratada en fotos de fiestas y reuniones, pueden ser usados por terceras personas, algunos amigos nuestros y otros amigos de nuestros amigos, para así publicitar o decorar juegos o weblogs personales o empresariales, o lo que es peor aún, para con esas informaciones usurparnos nuestra identidad a través de la creación de una cuenta de correo con nuestro nombre y con nuestra foto, y por intermedio de ella llevar adelante algún tipo de broma de mal gusto, o algún tipo de estafa informática, o alguna otra clase de engaño o de delito.

Téngase presente que incluso si en determinado momento decidimos darnos de baja de un portal social, nuestros datos más sensibles y nuestras imágenes bien podrían quedar en las copias de seguridad de alguna de estas empresas, para luego dar a este material el destino que fuera y sin nuestro expreso conocimiento y autorización.

Por lo dicho, instamos a los desprevenidos usuarios de las redes sociales y de otros sistemas de Internet, a ser precavidos, a pensar dos veces lo que hacemos, y por ejemplo a ser renuentes en responder a ciertos test con apariencia de encuesta, que entre otras cosas nos podrían invitar a proporcionar nuestro nombre de pila, sexo, y edad, así como a responder a ciertas preguntas comprometedoras, como por ejemplo: "¿Te declaras partidario del amor libre?"; "¿Alguna vez has sido infiel a tu esposo/a o a tu nivio/a?"; "¿Eres homofóbico?"; "¿Describe y publica la foto más comprometedora que alguien te haya sacado?"; etcétera, etcétera.

Pero sigamos analizando algunos otros de los peligros o inconvenientes que nos deparan las redes sociales. Veamos ahora lo que bien podríamos llamar "Ley del salvaje oeste". Como en la época dorada de los vaqueros y de los indios, la cual el cine estadounidense se encargó de popularizar, la "Ley de seguridad/inseguridad en Facebook" depende del territorio en el que nos encontremos. En efecto, si ponemos un comentario en un perfil que tenga una configuración diferente a la nuestra propia, todos quienes tengan acceso a ese perfil lo podrán ver, aunque explícitamente nosotros no conozcamos a esas personas ni las hayamos declarado como amigas; así que atención, algo que expresemos, o una información que aportemos, a partir de allí puede comenzar a circular, y con el tiempo puede llegar a alcanzar destinos y aplicaciones inimaginables.

Otro tema por cierto bien espinoso es el relativo a algún tipo de información bancaria o relativa al domicilio. Está bien, las redes sociales se prestan para hacerse de amigos, y con los amigos podría darse el caso de que quisiéramos intercambiar algún tipo de encomienda, o concretar una determinada compra/venta. Pero por favor, si decidimos que algo así se concrete, nunca implementarlo a través de Facebook, no solamente porque nuestro supuesto amigo o amiga bien podría ser un timador, sino porque también los datos sensibles que eventualmente aportemos bien podrían quedar en posesión de terceras personas.

En efecto, si realizamos algún pago a través de Facebook, por ejemplo, en los conocidos "regalos de cumpleaños", nuestros datos podrían quedar almacenados en los servidores del portal social por años, y en determinado momento ser usados por algún empleado deshonesto de esa empresa proveedora de servicios de Internet, o incluso eventualmente por otro usuario.

Claro, se puede cambiar la opción "almacenar / no almacenar datos de pago", pero en ciertas oportunidades la opción predeterminada no es la que más nos protege. Debemos acostumbrarnos a reiterar cada vez nuestras identificaciones de acceso a un sistema así como las correspondientes contraseñas. Debemos acostumbrarnos a ingresar cada vez nuestros datos de pago si es que vamos a hacer varias compras sucesivas. Seamos cautos, que en ocasiones los descuidos pueden tener funestas consecuencias.

Pero continuemos analizando otras posibles falencias en la seguridad o en la privacidad, que bien pueden darse en las redes sociales.

¿En nuestra lista de contactos tenemos amigos o enemigos?

Si por ejemplo se nos ocurre etiquetar a un amigo en una foto en la que salimos nosotros, a efectos de compartir con él esa imagen, y éste permite el acceso a terceras personas, esa foto bien podría ser copiada sin nuestro consentimiento, y luego ser usada en publicidad, o en artículos y programas de chismerío, aún cuando en nuestra configuración de privacidad hayamos elegido la opción "sólo mis amigos".

Al igual que en la razón que orientaba la "Ley del salvaje oeste", la realidad beneficia al más fuerte, y al más hábil, y al más rápido. En un caso como el planteado, la configuración de nuestro amigo prima sobre la nuestra propia, dependiendo del territorio en el que nos encontremos, y en algunos casos favoreciendo intereses espurios de terceros que nunca nos hubieramos podido imaginar.

Pero pasemos a otra falencia de Internet y de las redes sociales: Motores de búsqueda indiscretos.

Por defecto, Facebook permite que las principales webs de búsqueda nos encuentren en el espacio social, pues bueno, así se da un servicio adicional que suelen apreciar muchos usuarios. Para concretar esa búsqueda, simplemente debemos teclear un nombre en el cuadro de descriptores de búsqueda, y listo, ya está. Si hay suerte, se ubica a la persona a la que deseamos contactar, pues muchos de sus datos aparecerán entre los resultados de la búsqueda. Claro, la anterior referida opción puede cambiarse para no poder ser ubicado a través de los buscadores, pero bueno, quienes recién se inician en el uso de una red social, por lo general no toman en cuenta estos detalles, y tal vez las opciones por defecto le construyen configuraciones que no son acordes a los propios deseos y a las propias necesidades.

Otro aspecto, si nos hacemos seguidores (lo que en cierta jerga se llama "hacerse fan") de un equipo de fútbol, o de una campaña social, o de un artista, o de un partido político, etcétera, nuestro nombre aparecerá en los resultados de búsqueda en esa página de seguidores, y por allí igual nuestros datos se podrían filtrar a los buscadores.

Pero hay más, hagamos ahora referencia a lo que algunos llaman "Paradoja zombi" o lema "Atrapado vivo o muerto".

Si decidimos borrarnos definitivamente de Facebook, el proveedor de este servicio generalmente se reserva el derecho de no borrar todos nuestros datos de sus servidores durante los siguientes 90 días. Claro, por cierto se comprenden ciertas restricciones técnicas que pudieran plantearse en la situación aludida. Se comprenden también las situaciones que reglamentariamente pudieran plantear Gobiernos y autoridades de control, empeñadas en el combate al terrorismo y a los fraudes informáticos. Pero bueno, nótese de todas formas la posición vulnerable de los usuarios, que no tienen medios de comprobar si efectivamente todos sus datos fueron borrados luego de pasado cierto tiempo de una solicitud de baja, y que tampoco tiene medios para reclamar daños y perjuicios si llegan a enterarse que sus datos siguen en los servidores luego de transcurridos unos cuantos meses de haberse apartado de un portal social.

Muy bien, hasta aquí la enumeración de las principales falencias y de los principales problemas de muchas de las redes sociales, y en particular de Facebook.

Pasemos entonces a reflexionar inteligente y críticamente sobre los asuntos planteados.

Primero que nada, corresponde no exagerar las situaciones de peligro que fueron señaladas, a la par de reconocer que varios de los inconvenientes anotados no son exclusivos de las redes sociales.

Pensemos por ejemplo en el caso de un usuario individual o empresarial, que decide organizar un sitio web propio, contratando para ello un específico nombre de dominio a efectos de así personalizar el acceso a ese espacio digital propio, y pensemos que esta situación se extiende por varios años.

Supongamos además que en determinado momento se decide discontinuar esta experiencia, o que simplemente por olvido, se deja de pagar al Proveedor de Servicios de Internet (PSI) por el alojamiento web y por el nombre de dominio contratado. ¿Qué es lo que pasa en esta situación?

Bueno, es de esperar que el PSI deje de pagar por el nombre de dominio de su ex cliente, y que también dé de baja toda la información del correspondiente sitio web en sus propios servidores, y efectivamente esto es lo que generalmente ocurre. Muy bien, pero... ¿Qué hace la empresa que se ocupa de los registros de dominio? ¿Y qué pasa con los duplicados de los contenidos del sitio web que fueron registrados en los servidores que manejan los buscadores?

Claro, lo que efectivamente pase en un caso concreto como el planteado dependerá de muchos factores particulares, pero tenemos conocimiento de un caso específico, en el cual al menos Google por mucho tiempo continuó manteniendo en sus servidores toda la información del sitio al momento de haber sido discontinuado, y que por su parte el administrador de los nombres de dominio puso a la venta el particular y discontinuado nombre de dominio, posiblemente en mérito a que el sitio web había recibido durante su permanencia en el ciberespacio un número muy elevado de visitas, y por tanto, si alguien contrataba esa denominación para un nuevo espacio digital, podría eventualmente verse beneficiado con los seguidores del sitio de la etapa anterior.

Con el caso planteado lo que se desea poner de relieve, es que en situaciones rebuscadas no solamente Facebook podría plantear problemas a los usuarios, sino que los inconvenientes también podrían surgir si se usaran otras tecnologías.

En conclusión: ¿Qué deberían hacer los usuarios?

Por cierto, es tonto negarse a usar Internet o limitarse en las aplicaciones informáticas, por un simple recelo en cuanto a eventuales problemas que pudieran plantearse.

En mi opinión personal, lo correcto sería usar todas las tecnologías disponibles que eventualmente nos pudieran resultar de utilidad, sin descuidar la guardia en cuanto a los posibles inconvenientes o las posibles desviaciones que nos pudieran afectar.

En particular y en relación a la telecompra, la conclusión que deberíamos sacar es que el manejo de los pagos (sean hechos a través de redes sociales o por otros procedimientos) aún no tiene las seguridades adecuadas, y por tanto y por el momento, podría ser conveniente no hacer pagos directamente a través de Internet, o restringir los mismos todo lo posible en espera de procedimientos más seguros.

Y en lo referido al uso de las redes sociales, lo que deberíamos hacer es partir de la base que todo texto y toda imagen manejado/a a través de este sistema podría eventualmente ser copiado/a para así darle un uso ilegítimo, y entonces nuestra posición frente a esta realidad, debería ser no manejar allí información o documentos que pudieran ser sensibles, como por ejemplo los datos del domicilio o las señas de una dirección postal, fotos o documentos que en algún momento nos pudieran comprometer o perjudicar, mensajes que deseamos sean estrictamente privados, etcétera, etcétera.

Las redes sociales pueden aportarnos servicios inestimables: Localizar a antiguos compañeros de trabajo o de estudios que hace años no vemos; Hacer públicas posiciones personales que no tenemos ningún inconveniente en que se manejen y difundan en forma libre; Participar en foros sobre temáticas de nuestro interés; Hacer nuevas amistades en nuestro entorno geográfico más inmediato y también en regiones lejanas; Divertirse con amigos y pasar momentos agradables en base a acontecimientos especiales o a chismes; Festejar aniversarios a la distancia; Comentar eventos deportivos o acontecimientos políticos con amigos o con desconocidos, etcétera, etcétera.

Internet y los diferentes sistemas en base a él implementados son herramientas, y está en los propios usuarios manejarlas bien o mal.


PARA QUIENES SE INTERESEN EN EL TEMA DE LOS DELITOS Y LOS FRAUDES INFORMÁTICOS

Se les recomienda especialmente consultar los artículos que se listan a continuación.

(a) La viveza individual o la estupidez colectiva
http://misteriosdenuestromundo.blogspot.com/2010/04/la-viveza-individual-o-la-estupidez.html
Publicado el viernes 9 abril 2010

(b) Lecturas seleccionadas: Estafas basadas en el crecimiento (Parte I)
http://misteriosdenuestromundo.blogspot.com/2010/04/lecturas-seleccionadas-estafas-basadas.html
Publicado el sábado 10 abril 2010

(c) Lecturas seleccionadas: Estafas basadas en el crecimiento (Parte II)
http://misteriosdenuestromundo.blogspot.com/2010/04/reflexiones-sobre-el-sistema.html
Publicado el domingo 11 abril 2010

(d) Disparatario: Anuncios clasificados "Por ausentarme del país este fin de semana, vendo urgente BILLETE PREMIADO DE LOTERÍA al mejor postor"
http://misteriosdenuestromundo.blogspot.com/2010/04/disparatario-anuncios-clasificados-por.html
Publicado el jueves 22 abril 2010

(e) Internet es una puerta a la cultura y a la información, es un medio apto y ágil para la comunicación social, pero además es una posible vía de ataque
http://misteriosdenuestromundo.blogspot.com/2010/05/internet-es-una-puerta-la-informacion-y.html
Publicado el jueves 20 mayo 2010

(f) Una necesidad de nuestra época: La alfabetización digital y mediática
http://misteriosdenuestromundo.blogspot.com/2010/05/una-necesidad-de-nuestra-epoca-la.html
Publicado el sábado 29 mayo 2010

(g) ¿Quienes son los más honestos? ¿Cómo podemos promover mayor transparencia y honestidad de procederes en nuestra sociedad?
http://misteriosdenuestromundo.blogspot.com/2010/06/quienes-son-los-mas-honestos-como.html
Publicado el sábado 5 junio 2010

(h) Internet nos proporciona información muy valiosa, pero también puede ser fuente de confusión y engaño: Los bulos digitales, los mensajes tramposos
http://misteriosdenuestromundo.blogspot.com/2010/06/un-bulo-digital-o-sea-una-noticia-falsa.html
Publicado el lunes 7 junio 2010

(i) Los engaños digitales: ¡Cuidado!, el ingenio de los piratas informáticos no tiene límite, y ningún usuario puede estar a salvo de timos
http://misteriosdenuestromundo.blogspot.com/2010/06/los-enganos-digitales-cuidado-el.html
Publicado el miércoles 16 junio 2010

(j) Beneficios y peligros de las redes sociales: Como todas las herramientas, todo depende de cómo se las utilice
http://misteriosdenuestromundo.blogspot.com/2010/06/beneficios-y-peligros-de-las-redes.html
Publicado el jueves 17 junio 2010

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