Entre los muchos desafíos que envuelven al hombre, como figura principal se encuentra el misterio, el que está incorporado en las religiones y en todo lo que nos rodea, y que nos maravilla cuando logramos rasgar el velo de superstición, y tenemos éxito en resolver enigmas y en esclarecer verdades escondidas. Aportemos en este espacio para ayudar a resolver misterios, y así contribuir al surgimiento de una sociedad más solidaria y justa, más equitativa, más sustentable, más racional y culta.
viernes, 17 de diciembre de 2010
Vida fuera de nuestro mundo azul: Una interesante investigación, un razonamiento especulativo que se las trae, una inquietante posibilidad
Vida en otros mundos de nuestro Sistema Solar, vida en la Vía Láctea, vida en otras regiones del Universo
De los estudios efectuados sobre los cuerpos que integran el Sistema Solar, los astrónomos han llegado a la conclusión de que todo planeta o conjunto de planetas, necesariamente deberá existir orbitando a un determinado astro central o estrella.
Las estrellas supergigantes rojas y azules, son demasiado voluminosas y envolverían con sus atmósferas a sus respectivos planetas. De esto se deduce que las estrellas más propicias para contener planetas con vida, son las del tipo F y G, es decir, estrellas parecidas al Sol (estrellas de tipo solar).
Con respecto al origen de nuestro Sistema Solar, podemos decir que hubo astrónomos que han sostenido que el mismo se formó por desprendimientos de la masa solar (caso de Conde de Buffon Georges Louis Leclerc, James Hopwood Jeans, Harold Jeffreys, etcétera). Éstas son, en suma, las teorías dualistas o catastróficas, que sostienen que el acercamiento de una estrella a nuestro Sol, habría provocado el desgajamiento de materia que luego se condensó formando los planetas y los cuerpos menores.
Otros astrónomos, por el contrario, prefieren no una teoría de tipo del "encuentro", sino una visión monista, nebular, o evolutiva, o sea como las que han sostenido, en sus diversas versiones, tanto René Descartes como Immanuel Kant o Pierre-Simon Laplace.
En suma, a partir de una masa original, una nebulosa se condensó por acción de la fuerza de gravedad, y como uno de sus efectos dio origen a nuestro sistema solar, o sea dio origen al Sol y a los planetas.
Si hubo catástrofe, en la hipótesis que los encuentros entre estrellas se den en la relación de uno a un millón, como en nuestra Galaxia Vía Láctea hay por lo menos 100.000 millones de estrellas, debemos concluír que en un cálculo muy conservador, unas 100.000 estrellas contendrían planetas, y un porcentaje de estos podrían tener vida.
Ahora bien, como nuestra galaxia es tan sólo una, entre las 100.000 galaxias fotografiadas a través de los telescopios terrestres, se comprenderá el enorme número de posibilidades existentes donde eventualmente puede haber condiciones favorables para la vida.
Esta probabilidad se ha incrementado últimamente, cuando la utilización del telescopio espacial Hubble, en órbita a unos 600 kilómetros sobre la superficie terrestre (y libre por tanto de la contaminación lumínica y de la interferencia del manto atmosférico), ha permitido descubrir la existencia de 50.000 millones de galaxias.
Surge entonces una nueva interrogante: ¿Qué entendemos por vida?
Como la respuesta a esta cuestión es sumamente compleja, podríamos simplificar preguntando si existirán mundos que puedan albergar plantas, animales, u organismos similares a los que existen aquí, en la Tierra.
En este punto la astrofísica colabora enormemente, admitiendo la unidad de la composición físico-química del Universo conocido, es decir, que los elementos químicos presentes en nuestro planeta, también lo están en todo el Cosmos asequible. Asimismo, otra ciencia, la cosmología, nos dice que las leyes que conocemos son válidas en todas la regiones del Universo explorado.
Cuando aquí, en nuestro planeta, se estudian los seres vivos, aparece un elemento básico, que es el carbono, el cual forma largas cadenas y moléculas complejas. El problema radica en saber si pudieran existir otros elementos (como el germanio o el silicio) que también pudiera formar largas cadenas moleculares.
La respuesta a esto, desde el punto de vista estrictamente científico, pareciera ser bastante negativa. Aparentemente el único elemento, aparte de carbono, que es capaz de formar cadenas complejas, es el silicio.
Pero las cadenas formadas por el silicio, son más cortas que las del carbono, y cuando artificialmente se trata de estirarlas, se rompen. Así podemos concluir que nuestro átomo básico para la vida básicamente es el carbono, y no habría muchos otros candidatos para eventualmente sustituirlo.
Obviamente, en relación a lo planteado también entra a tallar (a influir) el factor temperatura, dado que si la temperatura es muy elevada, las moléculas de carbono se rompen. Y si por el contrario la temperatura es muy baja, no se pueden formar nuevas cadenas, ya que todos los procesos químicos en ese ambiente llegan a detenerse.
Se deduce así, en primera instancia, que ningún ser viviente basado en las cadenas del carbono, podría resistir las altísimas temperaturas imperantes en los planetas interiores a nuestro sistema solar. En efecto, Mercurio está calcinado a unos 300 grados Celsius. Y Venus, más distante del Sol, tiene una temperatura aún más elevada, cerca de unos 500 grados Celsius, por el famoso efecto invernadero.
Por otra parte, las temperaturas imperantes en las poderosas atmósferas de los "Planetas Jovianos" es decir, Júpiter, Saturno, Urano, y Neptuno, son bajísimas.
Y en cuanto a los asteroides, son todos muy diminutos en tamaño y masa, como para retener una atmósfera respirable.
De todo lo expuesto, se concluye que es muy baja la posibilidad de encontrar vida en el ámbito de nuestro Sistema Solar, a excepción del planeta azul que nos alberga.
Posibles y eventuales candidatos con más posibilidades son: (1) Marte, donde se busca agua líquida y microorganismos en el subsuelo; (2) Una luna de Júpiter llamada Europa, que contiene un océano de agua salada debajo de una capa de hielo; (3) Un satélite de Saturno llamado Titán, que es muy prometedor, con hidrocarburos, y una atmósfera considerable. Y a los citados tal vez se podrían agregar unos tres o cuatro candidatos adicionales, pero no mucho más que eso.
Pero todo lo planteado, por cierto no descarta la posibilidad de que exista vida en otras regiones de la Vía Láctea, y por supuesto, también en otras regiones del Universo.
Se podría pensar, que si los planetas se forman normalmente cuando las nebulosas se condensan en estrellas y mundos, con certeza deberían existir muchísimos "sistemas planetarios" a lo largo y ancho de nuestro Universo.
Los radioastrónomos han sugerido que tal vez, sería posible comunicarnos con los hipotéticos habitantes del espacio, por medio de "ondas de radio", las cuales viajan a la velocidad de la luz (300.000 kilómetros por segundo).
Claro que previamente, deberíamos ponernos de acuerdo hacia dónde enviar los mensajes.
Lo más lógico, sería enviarlos hacia estrellas parecidas al Sol, pues enviarlos hacia cualquier dirección del espacio, implicaría un gasto inútil de tiempo y energía.
En el caso de escoger a la estrella Rigil-Kentaurus (Alfa de la constelación del Centauro) que es un sistema estelar triple, y ubicado a 4,3 Años Luz, con mucha suerte, la eventual respuesta la recibiríamos recién después de 9 años.
Otro problema es que desconocemos el "lenguaje" de los seres extraterrestres, pero si fueran inteligentes, muy posiblemente conocerían la matemática, y estarían en condiciones de descifrar un código escogido. Por ejemplo, se podría enviar una serie de pulsaciones, hacer una pausa, y seguir emitiendo luego la misma secuencia.
Si son inteligentes de verdad, conocerían la matemática y la física, y entonces no sólo podrían interpretar nuestro "código" escogido, sino que serían tal vez, capaces de responder de forma aún más compleja y completa.
Lecturas recomendadas
1. Origen del Sistema Solar - Parte 1
http://www.desdelared.com.mx/2010/familia/0125-astronomia.html
2. Origen del Sistema Solar - Parte 2
http://www.desdelared.com.mx/2010/familia/0208-astronomia-origen.html
3. Astronomía: Origen del Sistema Solar - Parte 1
http://www.astromia.com/astronomia/origensistema.htm
4. Astronomía: Origen del Sistema Solar - Parte 2
http://www.astromia.com/astronomia/origensistema2.htm
5. Astronomía: Origen del Sistema Solar - Parte 3
http://www.astromia.com/astronomia/origensistema3.htm
6. Los agujeros negros: Enigmas del Universo
http://www.desdelared.com.mx/2010/familia/0226-agujero-negro.html
7. Astrobiología: Escuchar las magnetosferas de exoplanetas habitables
http://www.cienciakanija.com/2009/03/31/escuchar-las-magnetosferas-de-exoplanetas-habitables/
CULTUREMAS PARA EL SIGLO XXI, HIPERTEXTOS EDUCATIVOS, SAPIENCIARIO DE DIGIMUNDO
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