miércoles, 25 de febrero de 2015

Un fenómeno extraño: Los tres soles

Introducción


Nuestra visión del universo hasta no hace tanto tiempo, se hacía mirando al cielo a simple vista o con ayuda de telescopios o de otros aparatos de observación en tierra firme.

Hoy día también tenemos telescopios en el espacio exterior.

Pero lo que vemos desde Tierra con o sin instrumentos, a veces refleja reales fenómenos astronómicos de nuestro sistema planetario o de lugares mucho más lejanos, pero otras veces muestra particularidades y distorsiones en buena medida con origen en nuestra atmósfera o eventualmente provocados por los propios instrumentos de observación, o irregularidades de las placas fotográficas que se utilicen, etc. Tal es el caso por ejemplo de las llamadas auroras polares, y de los llamados múltiples soles (soles dobles o triples), cuyo origen en buena medida debe atribuirse a efectos ópticos provocados por nuestra atmósfera.


Cuando el sol se observa doble o triple


El 21 de febrero de 2015, en las costas de Maldonado, Uruguay

El 21 de febrero de 2015, gran conmoción provocó la aparición, en la zona de Punta del Este (Uruguay), de tres soles en el firmamento estival, algo que particularmente se observó en la conocida playa Chihuahua

Se trató de un fenómeno aparente, de naturaleza óptica, producido por la refracción y la reflexión de la luz solar.

Las nubes altas, tales como cirrostratos, están constituídas por agujas de hielo, y pueden producir algún tipo de reflejo que permite apreciar esta insólita apariencia. 

Por cierto no es esta la primera vez que ocurre algo de este tipo en alguna parte del mundo, dado que existen antecedentes notables. 

En China, a fines del año 2012, se produjo un gran pánico entre los habitantes de Shanghai, cuando aparecieron en el cielo, señales que según algunos, anunciaban el Apocalipsis.

Curiosamente, en la República Popular China, oficialmente atea, gran parte de la población es muy supersticiosa. Así que resultó normal, que muchos lo tomaran como el anuncio del fin, o como el principio del fin.

En realidad se trata de un fenómeno atmosférico: el "Parhelio" se produce cuando nubes altas, como los cirros densos, por encima de los 6.000 metros, se interponen entre el Sol y los observadores, creando un halo donde se pueden apreciar destellos.

La luz solar refractada en cristales de hielo, suspendidos en la atmósfera a 30 ó 35 grados bajo cero, da lugar a por ejemplo dos o tres réplicas del Astro Rey.

Este extraño fenómeno, también fue grabado el 19 de enero de 2014 por un testigo desde un vagón del metro de Moscú (en Rusia).


Naturalmente, el fenómeno señalado no tiene nada que ver, con lo que según ciertas tradiciones se interpretan como señales de que se acerca el Armagedón (término bíblico que aparece en el libro del Apocalipsis, capítulo 16, versículo 16, y que quiere decir "fin del mundo" o "fin del tiempo a través de catástrofes).


Desde el punto de vista físico, el fenómeno es simplemente una ilusión óptica, provocada por los cristales helados de las nubes de gran altitud, que reflejan la luz solar creando la ilusión de la existencia de múltiples soles en el firmamento.


Galería de imágenes - Auroras polares


Así se producen las auroras polares


Así se observan las auroras boreales o australes











Galería de imágenes - Soles múltiples

Día martes 4 de agosto de 2009


Amaneciendo en la ciudad rusa de Kazán, el lunes 5 de mayo de 2014
Tres soles en el cielo y un insólito arcoiris invernal

En las cercanías de la ciudad de Chifeng, en el norte de China
Insólito, tres soles en el cielo , día sábado 2 de noviembre de 2013

Sol doble en Punta del Este, Uruguay

sábado, 14 de febrero de 2015

El Planetario de Montevideo, primero de Sudamérica, cumplió sesenta años de existencia el 11 de febrero de 2015

Informaciones generales

En los últimos tiempos, se han difundido los planetarios en todas las grandes ciudades, esas gigantescas cúpulas hemisféricas, en cuya bóveda se proyecta un cosmorama interior, una especie de cielo artificial, que reproduce exactamente toda la esfera celeste, con sus fenómenos, sus apariencias, sus leyes y sus movimientos (tanto simulando retrocesos o avances en el tiempo, como simulando desplazamientos del observador sobre la superficie terrestre).

En el caso del planetario de Montevideo, el instrumento proyector, aparato de unos cinco metros de altura, se mueve por medio de impulsos eléctricos, y permite a los espectadores ubicados en la gran sala central, seguir los movimientos del cielo con gran precisión y detalle. 

El día 11 de febrero de 2015, el querido Planetario Municipal, cumplió sesenta años de prolífica labor, y precisamente estas líneas pretenden recordar ese acontecimiento, y rendir homenaje a los que allí trabajaron y especialmente a sus directores.

En efecto, allá por 1955, nacía esta hoy día conocida institución, pionera de todos los planetarios de Iberoamérica, ya que efectivamente fue la primera en construirse y abrir sus puertas al público.

El impulsor de este grandioso proyecto fue el agrimensor Germán Barbato (1896-1965), un apasionado por la astronomía, ciencia a la que enalteció estudiando con ahínco los fenómenos celestes, e hizo que aplicara su noble energía a la creación de un planetario en la ciudad de Montevideo que hoy lleva su nombre. 

Su cerebro alimentó la idea, y su cargo de entonces como Intendente de Montevideo, lo convirtió en el brazo ejecutor del auspicio proyecto. En los hechos y como ya se dijo, este planetario fue el precursor de todos los de Sudamérica

Su capacidad original, era de unas 300 butacas. No obstante, ha experimentado en los últimos años algunas modificaciones, dado que ahora cuenta con un sofisticado sistema informático y con un moderno equipo donado por el gobierno nipón. 

Su primer director fue el conocido ingeniero Fernández Guido, y su sucesor como director-docente, fue el profesor Osvaldo Vaio, quienes contaron por cierto con valiosos colaboradores, como ser los profesores Mario Giadas, Gerardo Pacheco, y Luis Hermida, todos ellos magníficos conferencistas.

Posteriormente, se encargó la dirección al profesor Alejandro Castelar, y su actual director es Oscar Méndez, ambos grandes docentes y mejores personas, quienes iniciaron una fecunda época de renovación y actualización. 

La masiva asistencia de alumnos de Enseñanza Primaria y Secundaria al planetario de Montevideo, así como  la nutrida concurrencia de público en general, son prueba tangible de su atractiva labor de difusión de la ciencia astronómica. La educación en Uruguay da interesantes oportunidades y tiene sus joyitas, y el Planetario Municipal sin duda es una de ellas.

Galería de imágenes

Aparato proyector


Integrantes de la Sociedad Uruguaya de Astronomía


Grupo de estudiantes en visita al Planetario Municipal


Vista exterior


Otra vista exterior


Vista interior de la sala principal


Sala oscurecida presentando una observación nocturna